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Svetlana ante el espejo Cuadro de Karl Briuliov |
Como he dicho en otros artículos
de este blog, la cuestión de la autoconsciencia es más filosófica que
científica. A este respecto, dos grandes teorías filosóficas han coexistido
desde tiempo inmemorial:
·
Monismo: Todo lo que podemos percibir, incluida la consciencia, se puede explicar
en función de una sola componente: la materia, en el sentido más
amplio del término, que incluye también la energía. A su vez, el monismo puede
clasificarse en dos teorías diferentes:
o
Monismo reduccionista: Sostiene que todo el funcionamiento del universo puede explicarse de
abajo arriba. O sea, que si supiéramos bastante sobre las partículas
elementales y sus propiedades, podríamos explicarlo todo, incluso la
autoconsciencia.
o Monismo emergentista: Sostiene que el nivel inferior no explica todo lo que ocurre en el nivel superior, pues hay propiedades (entre ellas la autoconsciencia) que sólo pueden explicarse de arriba abajo. Es decir: los sistemas complejos pueden tener comportamientos impredecibles de abajo arriba.