Mostrando entradas con la etiqueta ciencia y filosofía. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ciencia y filosofía. Mostrar todas las entradas

jueves, 23 de septiembre de 2021

La naturaleza del mundo físico

Arthur Eddington
The same post in English

La naturaleza del mundo físico es el título de una obra señera en la historia de la divulgación científica. Publicada en 1928, recopila las conferencias Gifford pronunciadas en Edimburgo por su autor, Arthur Eddington, en 1927. Eddington era entonces famoso, por haber sido quien, en 1919, con ocasión de un eclipse solar, organizó la expedición que demostró una de las predicciones de la teoría de la Relatividad General de Einstein: la desviación de la luz al pasar cerca de una estrella. Se dijo de él que era una de las tres únicas personas en todo el mundo que entendían la Relatividad General. Además de esto, Eddington fue pionero de la investigación sobre el origen de la energía de las estrellas, pues fue el primero en proponer que procedía de la fusión del hidrógeno para formar helio.

jueves, 25 de marzo de 2021

Más tergiversaciones científicas de los medios

The same post in English

En mi primer día de clase en la titulación de Ingeniería de Telecomunicación solía decirles esto a mis alumnos:

No os creáis ninguna noticia científica de las que se publican en la prensa o en otros medios de comunicación generalistas. La mayor parte son falsas o han sido mal entendidas.

En artículos anteriores he mencionado varios casos de noticias tergiversadas por los medios, aunque a veces la culpa no es del periodista, sino del propio científico, que trata de colar como si fuesen ciencia sus ideas filosóficas basadas en el materialismo reduccionista. En este artículo voy a comentar tres noticias relativamente recientes, y trataré de explicar lo que realmente hay detrás de ellas.

jueves, 17 de diciembre de 2020

El enigma del orden natural

The same post in English

En 2019 se publicó un libro mío que se distribuyó con el periódico El País en una colección dedicada a la divulgación matemática. Mi libro se titula Todo es Número: ¿Es matemática la realidad? En él abordé el problema de si las ideas matemáticas corresponden a una realidad externa a nosotros, o si por el contrario son arbitrarias y varían con la mentalidad vigente. Dicho de otro modo, la cuestión es si las matemáticas se descubren, o se inventan. En uno de los artículos más leídos de este blog hablé de este asunto en relación con la existencia real (o no) de las cifras del número π (pi).

En el último capítulo de ese libro abordé un tema relacionado: si las teorías científicas, especialmente las que proponen los físicos, son verdaderas (en el sentido de que representan una realidad subyacente que existe independientemente de nosotros), o bien son construcciones mentales o sociales sin relación con una realidad que podría ser incognoscible (como los noúmenos de Kant) o incluso inexistente. Supongo que mis lectores no se extrañarán si les digo que mi postura personal es claramente realista, como también lo es la de muchos físicos, mientras que los partidarios de la hipótesis anti-realista suelen ser predominantemente filósofos.

jueves, 3 de septiembre de 2020

El problema del mejor de los mundos


Campo de concentración de Auschwitz
En 1993, William Rowe propuso un argumento filosófico ateo para demostrar que Dios no existe, que aunque se basa en el problema del mal (como tantos otros argumentos ateos), le da un giro algo diferente. Por eso se le ha puesto nombre, el del título de este artículo. El argumento puede resumirse así:
Si Dios existe y ha creado el universo, tiene que haber creado el mejor de los mundos posibles, desde el punto de vista moral. Pero dado un universo, siempre es posible idear un mundo mejor que ese. De hecho, el mejor de los mundos posibles no existe, siempre es posible imaginar uno mejor. Además, nuestro universo contiene bastante mal moral y dista de ser uno de los mejores. Luego Dios no existe.
Es curioso que, en respuesta a este argumento, algunos filósofos creyentes (como Klaas Kraay y otros), hayan recurrido para rebatirlo a las teorías del multiverso, que fueron ideadas inicialmente por pensadores ateos para enfrentarse al problema del ajuste fino. Según estos filósofos, el problema del mejor de los mundos se resolvería si Dios hubiese creado, no un universo, sino un multiverso que contenga todos los mundos mejores posibles, quizá en número infinito. No me parece que el intento tenga mucho porvenir. Es fácil prever que el mismo argumento que se aplica al universo puede aplicarse también al multiverso, con lo que no se habría resuelto el problema, sólo se habría trasladado a un nivel superior.

jueves, 21 de febrero de 2019

La irrazonable efectividad de la ciencia



Paul Davies
Paul Davies es un físico inglés, experto en cosmología y mecánica cuántica, muy conocido por su infatigable actividad como divulgador científico. En uno de sus artículos, con el mismo título que este [1], escribió lo siguiente:
El hecho de que del infierno sin rasgos distintivos del Big Bang emerja una variedad tan rica y compleja... como consecuencia de leyes de asombrosa simplicidad y generalidad... tiene un marcado sabor teleológico.
Y en el más famoso de sus libros, La Mente de Dios (1992), escrito en respuesta a Breve historia del tiempo de Stephen Hawking, Davies escribió las siguientes palabras:
El éxito del método científico para desentrañar los secretos de la naturaleza es tan deslumbrante, que nos puede cegar ante el mayor milagro científico de todos: que la ciencia funciona.
Lo que aquí plantea Davies tiene mucho que ver con uno de los problemas más acuciantes de nuestro tiempo, el debate entre realismo y anti-realismo, si usamos la nomenclatura de la filosofía analítica. Este debate se puede resumir con las siguientes palabras:

jueves, 10 de enero de 2019

Cinco años de Divulciencia

El problema de Aquiles y la Tortuga

Este blog cumple cinco años desde su creación, que tuvo lugar a mediados de enero de 2014. En este tiempo, el número total de visitas a las páginas del blog, sumando las versiones en español y en inglés, supera las 425.000. Si restamos una estimación de las visitas realizadas por bots, las de los seres humanos sobrepasan las 300.000. Por otra parte, su número ha ido creciendo progresivamente, desde las 16.000 visitas del primer año, hasta las 120.000 del quinto.
En este momento, sin contar este, el blog contiene 230 artículos. Es un número bastante alto, suficiente para que el lector se pierda si intenta seguir temas concretos, pues el orden cronológico de los artículos no tiene nada que ver con su orden temático. Como expliqué en un artículo anterior, me ha parecido conveniente establecer una serie de hilos temáticos que permitan seguir los artículos asociados con un tema, desde el principio hasta el final. El trabajo asociado ha sido considerable, pues fue preciso modificar todos y cada uno de los artículos ya publicados, excepto unos pocos, como este mismo, que no pertenecen a ningún hilo.
El número total de hilos temáticos es 22. En el artículo anterior antes mencionado, figuraban los once primeros. Aquí voy a añadir los once restantes. Si no se dice lo contrario, el orden de un hilo es el cronológico de la publicación de los artículos en él incluidos. El enlace asociado al título conduce al primer artículo del hilo. Estos once hilos son los siguientes:

Hilo temático
Nº de artículos
Comentarios
16
Predicciones científicas. ¿Se cumplen? A veces sí, a veces no. ¿Hasta qué punto estamos haciendo ciencia? ¿O simplemente abrimos líneas de investigación que nunca se cierran?
8
Cuestiones relacionadas con la matemática pura. A la matemática aplicada le corresponde el hilo siguiente. Uno de estos artículos, El Problema de Aquiles y la Tortuga, es uno de los más leídos del blog, tanto en su versión española como en la inglesa.
9
Usos y abusos de la estadística.
6
Cuestiones relacionadas con lo enormemente pequeño. ¿Sabemos todo lo que se puede saber? Es evidente que no, y probablemente nunca se conseguirá.
10
¿Cómo se divulga la ciencia en los medios de comunicación y en la prensa especializada, como las revistas de alta divulgación? Generalmente mal, pues se cometen numerosos errores.
10
La lógica es la base fundamental de la ciencia, pero mucha gente no sabe usarla correctamente. Por otra parte, muchos científicos confunden la ciencia con la filosofía y se ponen a filosofar sin saber que lo están haciendo. Lo malo es que luego intentan hacer pasar por ciencia sus elucubraciones filosóficas.
6
Algunas cuestiones científicas relacionadas de uno u otro modo con la fe.
15
Los políticos y la opinión pública adolecen de una enorme ignorancia científica, y lo que es peor, tratan de esconder lo que dice la ciencia cuando se opone a su ideología.
17
Cuestiones científicas relacionadas con la ficción, en la novela y en el séptimo arte. Cuatro de los artículos incluidos en este hilo pertenecen al mismo tiempo a otro.
14
Artículos que no se refieren a una ciencia concreta, sino al método científico y a los problemas que encuentra.
8
Este último hilo es un cajón de sastre en el que he metido los artículos que no encajaban en otros hilos. Como justificación, puedo aducir que muchos de los abusos de lenguaje denunciados en algunos de mis artículos tienen que ver con la medicina. Alguno de estos artículos también está entre los más leídos del blog. Como es natural, el ordenamiento de este hilo no es cronológico, sino temático. Dos de los artículos incluidos en este hilo pertenecen al mismo tiempo a otro.

Abuso del lenguaje científico


Estos once hilos contienen 113 artículos, que con los 114 del artículo anterior suman 227. Doce de los artículos pertenecen simultáneamente a dos hilos distintos.
En lo sucesivo, como he venido haciendo desde noviembre, procuraré ir colocando los artículos nuevos en los hilos temáticos que les correspondan.




Hilo Efemérides y Organización: Anterior Siguiente
Manuel Alfonseca

jueves, 18 de octubre de 2018

Ciencia o filosofía



Pierre Teilhard de Chardin
En un artículo anterior, hablando de la inteligencia, mencioné que existen cuatro teorías filosóficas incompatibles entre sí, que tratan de explicar el fenómeno de la consciencia humana. Las resumo brevemente aquí:
1.      Monismo reduccionista o funcionalismo biológico: la mente está totalmente determinada por el cerebro, y este por la red de neuronas que lo constituye. El pensamiento humano es un epifenómeno. La  libertad de elección es una ilusión. Somos máquinas programadas.
2.      Monismo emergentista: la mente es un producto evolutivo emergente con auto-organización, que ha surgido como sistema complejo a partir de sistemas más simples formados por las neuronas. Algunos sostienen que las estructuras subyacentes no pueden determinar por completo la evolución de los fenómenos mentales, pero que estos sí pueden influir sobre aquellas.
3.      Dualismo neurofisiológico: la mente y el cerebro son diferentes, pero están tan íntimamente unidos que llegan a constituir una unidad, son dos estados complementarios y únicos de un mismo organismo.
4.      Dualismo metafísico: la mente y el cerebro son dos realidades diferentes. La primera es una sustancia espiritual y no espacial, capaz de interaccionar con el cerebro, que es material y espacial. Ambas entidades pueden existir independientemente la una de la otra, aunque el cuerpo sin la mente acaba por descomponerse.

jueves, 24 de noviembre de 2016

El problema de Aquiles y la tortuga

Zenón de Elea
The same post in English

Zenón de Elea, discípulo de Parménides, es recordado sobre todo por sus paradojas que tratan de demostrar que el movimiento no existe, y especialmente por la paradoja de Aquiles y la tortuga, que afirma que sería imposible que Aquiles alcanzara a la tortuga en una carrera, siempre que le haya dado cierta ventaja de partida.
Sabemos que Aquiles corre más deprisa que la tortuga (si no, no podría alcanzarla y la paradoja no tendría sentido). Si le da ventaja, en el momento en que Aquiles empiece a correr, la tortuga estará ya a cierta distancia, en el punto A. Cuando Aquiles llegue al punto A, la tortuga habrá avanzado hasta el punto B. Cuando Aquiles llegue a B, la tortuga estará ya en C. Y así sucesivamente, hasta el infinito.
Aquiles tardará en alcanzar a la tortuga la suma de los tiempos que necesite para alcanzar los puntos A, B, C… El tiempo total será, por lo tanto, la suma de una serie infinita de números. El problema es que Zenón piensa que la suma de una serie infinita de números tiene que ser infinita, por lo que Aquiles jamás conseguirá alcanzar a la tortuga (esta es la conclusión de su razonamiento). Esto, sin embargo, no es cierto: existen numerosas series infinitas cuya suma es finita. Una de ellas es, precisamente, la que calcula el tiempo que Aquiles tardaría en alcanzar a la tortuga, según el razonamiento de Zenón.

jueves, 19 de noviembre de 2015

Sobre la inteligencia


The same post in English

En su libro On intelligence Jeff Hawkins escribe esto:
Francis Crick escribió un libro sobre el cerebro titulado La hipótesis asombrosa. La hipótesis asombrosa era simplemente que la mente es una creación de las células del cerebro. No existe otra cosa, ni magia, ni una salsa especial, sólo neuronas y un baile de información... Al llamar a esto una hipótesis, Crick era políticamente correcto. Que las células de nuestro cerebro crean la mente es un hecho, no una hipótesis. Es necesario que comprendamos lo que hacen estos treinta mil millones de células y cómo lo hacen.
¡Maravilloso! Por un lado, se afirma que es un hecho, no una hipótesis, que las neuronas del cerebro crean la mente. Por otro, se reconoce que no sabemos qué hacen ni cómo lo hacen. Entonces, ¿por qué sabe Hawkins que es un hecho y no una hipótesis? ¿Por ciencia infusa? ¿Cómo ha sido capaz de detectar ese hecho? ¿En qué argumentos se apoya? No da ninguno, simplemente lo afirma. ¿Esto es ciencia?

jueves, 26 de marzo de 2015

Sobre el problema del mal

campo de concentración de Auschwitz
The same post in English

En un artículo anterior sobre los himenópteros cazadores mencioné el problema del mal, también llamado a menudo problema del dolor, título del conocido libro de C. S. Lewis. Aquí quiero volver sobre este asunto, que aunque es más bien ético o filosófico, tiene también alguna relación con la ciencia, como se verá al final de este artículo.
Se distinguen dos tipos diferentes de problema del mal:
  1. El mal humano, el que provoca el hombre. El campo de concentración de Auschwitz se ha convertido en el paradigma más mencionado.
  2. El mal natural, el hecho de que los procesos naturales provocan mucho dolor al hombre y a otros seres vivos.

jueves, 12 de marzo de 2015

¿Qué es la vida?

Saccharomyces cerevisiae
The same post in English

Después de un siglo discutiendo sobre el origen de la vida, no estamos más cerca de saber lo que pasó. A mediados del siglo XX, cuando Stanley Lloyd Miller realizó el famoso experimento en el que obtuvo aminoácidos tras someter a descargas eléctricas una mezcla de metano, hidrógeno, amoniaco y agua, los científicos lanzaron las campanas al vuelo y anunciaron la inminencia de la fabricación de vida artificial en el laboratorio. Este tipo de previsiones suele pecar de optimista. En este caso lo fue.
La primera cuestión que se plantea es definir qué se entiende por ser vivo. Al considerar este problema con atención, se constata que existen seres que claramente están vivos y otros que sin duda no lo están. Nosotros, las plantas y los animales estamos vivos. Las piedras, el agua destilada, el dióxido de carbono, no lo están. En estos casos extremos no cuesta trabajo decidirse. Cuando Antony van Leeuwenhoek (1632-1723) descubrió los microorganismos (levaduras, infusorios, bacterias, espermatozoides y glóbulos rojos) tampoco se dudó de que están vivos. Pero las cosas no siempre son tan sencillas.

jueves, 20 de noviembre de 2014

El multiverso no resuelve el problema del ajuste fino

The same post in English

Los ateos recurren a las teorías del multiverso para escapar de la necesidad de aceptar la existencia de Dios como causa de un universo que parece diseñado para que sea posible la vida (ajuste fino). Al hacerlo, entran en contradicción con uno de los argumentos más empleados desde el siglo XIX para negar la existencia de Dios. Dicho argumento decía lo siguiente:
La hipótesis teísta ofrece una explicación del origen del mundo basada en dos entidades: Dios y el universo.
La hipótesis atea sólo precisa de una única entidad: el universo.
Luego la navaja de Occam favorece la explicación atea.
Como se sabe, el principio de la parsimonia, también llamado navaja de Occam, una de las bases fundamentales del método científico, afirma que, cuando hay que elegir entre dos teorías, debe preferirse la que necesite recurrir al menor número de entidades.
Pero la situación actual es muy diferente. Ahora la alternativa a la hipótesis teísta no es una única entidad, el universo, sino muchas (entre 10500 e infinitos universos). Es preciso, pues, reescribir el argumento, que ahora queda así:

jueves, 23 de octubre de 2014

El espejismo de Dawkins

The same post in English

La traducción al español del título del libro The God Delusion de Richard Dawkins (2006) no es fácil. La palabra inglesa delusion significa un engaño en que alguien cae de forma involuntaria. El título utilizado usualmente en las traducciones castellanas (El espejismo de Dios) me parece acertado, aunque espejismo no sea el equivalente literal de delusion.
Empezaré señalando un par de inconsistencias. Hay muchas más, pero detallarlas todas exige el tamaño de un libro, y eso ya se ha hecho (A.J.Wilson, Deluded by Dawkins?, 2007).
·         En el capítulo 3, Dawkins desmonta el argumento teísta de los admirados científicos religiosos (¿cómo no creer en Dios, si tantos admirados científicos creyeron?). Estoy de acuerdo con él, este argumento no tiene peso. Pero entonces, ¿por qué se empeña en aducir tantas veces el argumento de los admirados científicos ateos? La mitad del capítulo 1 se dedica a contarnos que Einstein no creía en un Dios personal. En el capítulo 2 afirma, más de una vez, que la mayor parte de los políticos fundadores de los Estados Unidos eran ateos, aunque muy pocos se atrevieron a reconocerlo públicamente. (Supongo que por eso imprimieron In God we trust en sus billetes de banco). También sugiere que Thomas Huxley, que inventó la palabra agnóstico para aplicársela a sí mismo, en realidad debía de ser ateo, aunque no lo reconoció por plegarse a las exigencias de la época. Confiesa que Newton... afirmaba ser religioso. Lo mismo hizo casi todo el mundo [en su época]. Le ha faltado poco para afirmar que Newton también fue un ateo oculto.

jueves, 9 de octubre de 2014

60 preguntas sobre ciencia y fe respondidas por 26 profesores de Universidad

Frente a la idea generalizada de que ciencia y fe son incompatibles, los 26 autores de este libro de la Editorial Stella Maris ofrecen una lectura diferente: despojan a los conocimientos científicos de la capa ideológica con que el materialismo los ha ido recubriendo desde el siglo XVIII, para dejar clara la necesidad de colaboración entre ciencia, razón y fe para ampliar el ámbito de nuestro conocimiento.
Más allá del significado que puedan poseer las convicciones particulares de cada especialista, hay un hecho significativo que podemos tomar como punto de partida: el siglo XX y lo que llevamos del XXI ha asistido al fracaso de las predicciones decimonónicas relativas a la muerte de Dios y el fin inminente de la religión, especialmente la predicción positivista de que el pensamiento religioso moriría a manos de la ciencia. Se puede afirmar que el escenario positivista de la muerte de la religión a manos de la ciencia, ni se ha cumplido, ni lleva visos de cumplirse. Y no se ha cumplido porque estaba equivocado.
El objetivo de este libro es contribuir a la limpieza y rehabilitación de la parte del pensamiento fronteriza entre ciencia y fe, que ha sido devastada por un cientificismo que no supo entender, ni la teología, ni la propia ciencia. Para ello, las sesenta preguntas que contiene el libro se agrupan temáticamente en diez subdivisiones:

jueves, 26 de junio de 2014

La ciencia es una herramienta

Francis Bacon
The same post in English

La utopía La nueva Atlántida, de Francis Bacon, contemporáneo de Galileo y pionero de la moderna filosofía de la ciencia, describe una sociedad perfecta que surge automáticamente de la práctica de la ciencia, a la que los habitantes de la isla de Bensalem han convertido en la base de su sociedad y de su gobierno. Como muchos de sus seguidores enciclopedistas, que un siglo después crearon el mito del progreso indefinido (véase mi artículo El mito del progreso en la evolución de la ciencia), Bacon creía que la ciencia del futuro llegará a salvar al hombre, que algún día conseguirá resolver todos los problemas humanos, abriendo paso al paraíso en la Tierra.

Este error es muy frecuente. A menudo se confunden las herramientas con el bien que se puede hacer con ellas, olvidando que las mismas herramientas también pueden emplearse mal. Veamos algunos ejemplos, entre otros miles que podrían aducirse:

·         Un martillo se puede utilizar para colocar una obra de arte donde todo el mundo pueda verla, pero también puede servir para destruirla, como intentó hacer un loco con la Piedad de Miguel Ángel.
·         Un escalpelo puede salvar una vida, ayudando a un cirujano a extirpar un tumor maligno, pero también puede servirle a un asesino para matar a su víctima.
·         Una bomba atómica podría desviar un asteroide que amenaza provocar una catástrofe al estrellarse contra la Tierra, pero también puede obliterar una ciudad, matando a cientos de miles de personas.
Isaac Asimov
·         En un artículo publicado en 1970 (The sin of the scientist, incluido en la colección The stars in their coursesIsaac Asimov se pregunta si la ciencia puede utilizarse para hacer el mal. Su respuesta es inequívoca: ¡Sí!. Y señala, como el peor pecado de los científicos en toda la historia, la invención de los gases venenosos durante la primera guerra mundial (hoy se llaman armas químicas).

La ciencia es una herramienta y las herramientas no son ni buenas, ni malas. Lo que es bueno o malo es el uso que se haga de ellas. La ciencia puede contribuir, y lo ha hecho, a la mejora del mundo y de la humanidad, pero no puede salvar al hombre de su propia maldad, porque también le proporciona mayores medios para ejercerla.

¿Hay, por tanto, algo por encima de la ciencia? ¡Por supuesto! La ciencia estudia los fenómenos y formula teorías para explicarlos. Funciona exclusivamente en el modo indicativo: esto es así (descripción); esto lo causa aquello (explicación). Desde que Aristóteles formalizó la lógica, se sabe que no se puede deducir, de dos premisas en indicativo, una premisa en imperativo. La ciencia no puede llevar a una conclusión del tipo: debes hacer esto y no lo otro.


Como cualquier otra herramienta, la ciencia debe estar bajo el control de la ética. No vale decir: puede hacerse, luego debe hacerse. Gracias a la ciencia, hoy podemos destruirnos a nosotros mismos. ¿Debemos hacerlo?

Hilo Ciencia en General: Anterior Siguiente
Manuel Alfonseca

jueves, 12 de junio de 2014

¿Diseño inteligente o evolución al azar?

Charles Darwin
Como toda teoría científica, la de la evolución será siempre provisional, pero en siglo y medio ha quedado muy bien contrastada. No es probable que venga una revolución que la declare obsoleta o equivocada, quizá tan sólo algún ajuste fino, como le pasó a la física de Newton con la teoria de la relatividad general de Einstein. Cualquier ataque contra la teoría de la evolución debería basarse en la constatación de hechos discrepantes, que hasta ahora no se han presentado.
El problema es que algunos de los que defienden la teoría de la evolución dan un paso más y caen en el mismo pecado del que acusan a sus oponentes, presentando elucubraciones filosóficas y afirmaciones dogmáticas como si fuesen teorías científicas contrastables.
Como cualquier teoría científica, la teoría de la evolución es un conjunto de hipótesis para explicar hechos conocidos, susceptibles de que se pueda demostrar que no son correctas. Se basa en la constatación comprobada de que las especies cambian, y estudia los mecanismos que pueden llevar a ello: mutaciones, ADN, selección natural... Cualquier connotación filosófica que se añada no tiene carácter científico, tanto si se afirma, con los creyentes, que detrás de todo hay un diseño inteligente, como si se dice, con los ateos, que todo es únicamente consecuencia de la casualidad.

jueves, 22 de mayo de 2014

Alucinaciones


The same post in English

En un artículo (Visions for all) publicado en su edición del 7 de abril de 2012, la revista Science News resume los trabajos de Tanya Luhrmann sobre las experiencias de Dios que mucha gente dice haber tenido. Después de cuatro años de investigación, la antropóloga cree haber demostrado la sorprendente conclusión de que la gente normal también puede tener alucinaciones. Dado que las alucinaciones son comunes en patologías como la esquizofrenia y la psicosis, se predice que las personas que tienen muchas de esas experiencias corren el riesgo de terminar psicóticas. En particular, dice el artículo, es posible que Juana de Arco hubiese terminado psicótica si no la hubiesen quemado los ingleses.

Este desarrollo tiene una premisa oculta. Haciéndola explícita, el razonamiento asociado puede resumirse así:
1.      Dios no existe.
2.      Luego todos los informes sobre experiencias de Dios deben ser alucinaciones.
3.      Mucha gente normal dice haber tenido experiencias de Dios.
4.      Luego mucha gente normal sufre alucinaciones.
5.      Tener muchas alucinaciones puede llevar a la esquizofrenia o la psicosis.
6.      Luego Juana de Arco se habría vuelto psicótica si los ingleses no la hubiesen quemado.
Pero si la primera premisa, la premisa oculta, fuese falsa (es decir, si Dios existe) todo el argumento cae por tierra, pues algunas experiencias de Dios podrían ser genuinas, en lugar de alucinatorias. En particular, la conclusión gratuita e inútil sobre Juana de Arco queda desautorizada.
Es una pena que revistas serias como Science News caigan en estas falacias que se basan en premisas ocultas no científicas, no probadas, y aún peor: imposibles de probar.


Hilo Ciencia, fe y ateísmo: Siguiente
Manuel Alfonseca

jueves, 24 de abril de 2014

El gran diseño

The same post in English

En el año 2010, los medios dedicaron mucha atención a un libro de divulgación científica de Stephen Hawking y L.Mlodinow, The Grand Design. Ahora que ha pasado algún tiempo, me parece oportuno hacer algunos comentarios, para lo que me voy a basar en algunas citas del libro que me parecen más significativas:
·         La filosofía ha muerto… Los científicos se han convertido en los portadores de la antorcha de los descubrimientos en nuestra búsqueda de conocimiento.
Estas frases aparecen al principio del capítulo primero. Aunque la mayor parte del libro es divulgación científica e historia de la ciencia, es irónico que plantee una sola aportación original (el realismo de modelos), que es pura filosofía.
·         La realidad objetiva no es cognoscible y por tanto no podemos suponer que exista… Sólo existen los resultados de las observaciones y los modelos que construimos para explicarlos… Cada modelo es válido (real) en su campo de aplicación…Dos modelos que tienen el mismo poder de explicación son igualmente válidos… El modelo de Ptolomeo es tan válido como el de Copérnico… Sólo se distinguen porque el segundo es más sencillo que el primero.
Lo anterior no es una cita literal, sino una paráfrasis resumida del capítulo 3, que describe el realismo de modelos, la aportación original del libro (con permiso de Berkeley). Los autores olvidan que el modelo de Copérnico predijo correctamente la paralaje de las estrellas próximas, que no tiene fácil explicación en el de Ptolomeo. En este mismo capítulo, Hawking y Mlodinow descartan el modelo del universo estacionario basándose en su incapacidad para explicar ciertas observaciones realizadas sobre el universo. ¿No deberían hacer lo mismo con el de Ptolomeo?
·         [El universo] no tiene una historia, sino todas las historias posibles… El pasado es indefinido y sólo existe como un espectro de posibilidades.
Estas afirmaciones del capítulo 4 las sacan de la formulación de Richard Feynman de la mecánica cuántica, un artificio matemático alternativo y equivalente a la mecánica de matrices de Heisenberg y a la función de onda de Schrödinger, que calcula la probabilidad de un suceso cuántico integrando sobre todas las trayectorias posibles. Para poder sacar esas conclusiones, Hawking y Mlodinow necesitan que el artificio represente de algún modo la realidad (esa realidad cuya existencia objetiva niegan), y por eso han inventado el realismo de modelos. Pero no dicen nada de las paradojas que surgen cuando estas teorías se aplican a objetos macroscópicos, como la del gato de Schrödinger. En cambio, la aplican alegremente al universo entero, sin justificar por qué puede hacerse eso. Además, ¿no habíamos quedado en que la realidad objetiva no es cognoscible? Entonces, ¿cómo podemos saber si el universo existe? Los autores ni siquiera se lo plantean, quizá porque de hacerlo acabarían en una contradicción.
·         ¿Cómo podemos saber si un ser tiene voluntad libre?... No sabemos resolver las ecuaciones de tres o más partículas en interacción. Un [ente] del tamaño de un ser humano contiene mil cuatrillones de partículas… sería imposible resolver las ecuaciones y predecir su comportamiento.
Esta discusión del capítulo 8 es absurda. Una calculadora mecánica tiene también cuatrillones de partículas; sin embargo, observando su comportamiento pasado podemos deducir que no tiene voluntad libre y predecir su comportamiento futuro. Los autores olvidan que el comportamiento de los objetos macroscópicos puede analizarse sin necesidad de aplicar la física de partículas. Además, la idea de la voluntad libre no proviene de la resolución de ecuaciones, sino de la introspección.
·         No hay restricción a la creación de universos enteros… La creación espontánea es la razón por la que existe algo en lugar de nada, la razón por la que existimos.
Suponiendo que esto sea verdad (lo que es mucho suponer), aún quedaría sin explicar por qué existen leyes que permiten que esto ocurra, con lo que estamos como al principio. Por lo demás, todo lo que dice el libro respecto al multiverso como posible explicación del ajuste fino no añade nada a lo que ya sabíamos.

Los científicos que se meten a hacer filosofía (esa misma filosofía que desprecian y consideran muerta) deberían tomarse la molestia de estudiarla un poco más a fondo. Así, al menos, tendrían cuidado en no transgredir algunas de sus bases fundamentales, como el principio de no contradicción. Esta crítica no sólo se aplica a Hawking, también a otros científicos conocidos, como Richard Dawkins, que al invadir el campo de la filosofía suelen demostrar su ignorancia.

Es una pena que los errores filosóficos de bulto en que caen los autores tiendan, para el lector cuidadoso, a desacreditar la totalidad del libro. Aunque proceda de aficionados a la filosofía, sería bueno que la única propuesta original de El Gran Diseño (el realismo de modelos) fuese analizada más a fondo.

Para terminar, una cita de Woody Allen (Getting even, 1971):

¿Es cognoscible el conocimiento? De no ser así, ¿cómo podemos saberlo?

Hilo: Multiverso y Ajuste fino Siguiente

Manuel Alfonseca