Arthur C. Clarke |
Ya se sabe que las previsiones de futuro son tanto más arriesgadas cuanto
más lejos apunten. Los lectores de mi blog deben saber que me
encanta guardar previsiones científicas de futuro, para poder comprobarlas
cuando llegan las fechas correspondientes. A veces he llegado a esperar medio
siglo para realizar esas comprobaciones, que en general suelen ser fallidas,
generalmente por exceso de optimismo, aunque a veces se acierta alguna. En este
artículo anterior apliqué las comprobaciones a algunas de las predicciones
realizadas por divulgadores tan eximios como Arthur C. Clarke e Isaac Asimov.
Las tres predicciones que voy a analizar hoy son todas para el año 2020, y se hicieron con menos tiempo por delante: 25 años en la primera, sólo 10 años o poco más en las otras dos. Veámoslas:
- La primera predicción aparece en el libro La
ciencia en el tercer milenio, de Manuel Calvo Hernando,
creador de la Asociación Española de Periodismo Científico, que ahora se
llama Asociación Española de Comunicación Científica (AECC). El libro se
publicó en 1995, y contiene predicciones a muy corto y algo más largo
plazo, alcanzando hasta el 2020, por lo que estamos en condiciones de
comprobarlas todas. Veamos algunas:
· En 2002 habríamos conseguido,
mediante manipulación genética, obtener vegetales comestibles resistentes a todos
los patógenos posibles.
· Antes del 2006 se habría logrado
la vacuna
contra el SIDA. Los cirujanos y enfermeras habrían sido reemplazados
por robots. Se dispondría de toda clase de órganos artificiales de repuesto,
que se podrían implantar mediante trasplantes. La alimentación humana habría
cambiado por completo, basándose en un aprovechamiento eficaz de la biomasa.
·
Antes del 2013 la enfermedad
de Alzheimer habría sido entendida, si no vencida. Se habría logrado un
tratamiento eficaz contra la arterioesclerosis. El agujero de ozono
habría sido reparado artificialmente. Y dispondríamos de medios para prevenir
eficazmente todo tipo de desastres naturales.
· Para el 2020 dispondríamos de superconductores
a temperatura ambiente. Habría cura para todo tipo de cáncer. Se
habría logrado comprender totalmente el problema del envejecimiento y los
procesos cerebrales. Muchas enfermedades heredables podrían ser corregidas
mediante terapia genética. Finalmente, sería posible crio-conservar
indefinidamente el cuerpo humano y devolverle la vida a voluntad.
Es evidente que Calvo Hernando fue excesivamente optimista al predecir los avances científicos de los 25 años siguientes, pues muy pocos han llegado a realizarse. Y es curioso que termine sus predicciones con este párrafo:
...permanecen vigentes la mayor parte de las grandes preguntas que se formulan o se han formulado el hombre y las sociedades humanas. ¿Dónde estamos? ¿Quién ha hecho las leyes de la naturaleza? ¿Qué hay más allá de la muerte? ¿Observa el universo alguien desde fuera de él? Y en último término, ¿quiénes somos?, ¿a dónde vamos?, ¿qué es el universo?
- El segundo juego de predicciones para 2020 lo realizó Ray Kurzweil
a
finales de 2009. En esa entrevista, publicada en NY Daily News,
Kurzweil hacía las siguientes predicciones a un plazo de sólo 10 años: Fin
de la obesidad; dispositivos con ordenadores integrados en el cuerpo;
teléfonos
móviles cada vez más pequeños y sin pantalla, comunicados con
nuestro cerebro a través de unas gafas, que harán aparecer en el aire la imagen
que debería verse en la pantalla. Esto último lo deduce suponiendo que la
tendencia anterior a 2009 continuaría igual: habréis
notado que los teléfonos móviles son cada vez más pequeños.
Pero no ha sido así: los teléfonos móviles son ahora cada vez más grandes.
El que compré en 2014 tenía una pantalla de 3,3”; uno de 2018 la tiene de
5,8”. El que acabo de comprar en 2020 la lleva de 6,2”. Ahora mismo es
difícil encontrar móviles con pantallas pequeñas. Es lo malo de apoyarse
en las tendencias actuales para predecir el porvenir: que dichas tendencias pueden invertirse.
- La tercera lista de predicciones la
publicó ABC el 21 de octubre de 2010 bajo el título Las increíbles tecnologías que cambiarán el mundo en
veinte años. Se las atribuye al Dr. Michio Kaku, que afirmó
que sus previsiones se cumplirían entre 2020 y 2030 (en 10 o 20 años).
Algunas de esas previsiones aparecen en el subtítulo del artículo: Lentillas que describen lo que vemos, televisores
transparentes o un váter que nos recomienda una dieta serán una realidad.
Y añade que los ordenadores hechos de hardware dejarán de utilizarse: Bastará con escribir en cualquier sitio y el archivo
se subirá a la nube. Y entonces, como si supiese a quién pertenece,
seguirá a su propietario “a cualquier sitio y en cualquier momento”... el
cepillo de dientes pedirá cita en el dentista si detecta una caries, la
ropa sabrá cómo está la temperatura corporal o si hay algún fallo
funcional y avisará a urgencias si es necesario. Estamos
entrando ya en los plazos previstos y no hay señales de que estos avances,
algunos de los cuales no me parecen nada deseables, vayan a tener lugar en
los próximos 10 años.
Hilo Temático sobre Futurología: Anterior Siguiente
ResponderEliminarAcabo de leer la entrada de hoy. Muy interesante. Gracias, Manuel
Muy interesante el artículo de hoy, muchas gracias Profesor Manuel.
ResponderEliminarHola! Te pongo mis dudas en varios comentarios para que sea más fácil responder si así lo consideras oportuno. Enhorabuena por el blog!
ResponderEliminarEn tu opinión, ¿quién ha sido el que más ha acertado o el que acertó con algún tema inesperado o de más calado? Es decir, quien se puede considerar fiable según tu criterio
ResponderEliminarArthur C. Clarke acertó en cosas relacionadas con su profesión (era ingeniero de telecomunicación), pero falló en cosas de otros campos. Sus dos predicciones más acertadas fueron los satélites geoestacionarios para facilitar las comunicaciones mundiales, que predijo dos décadas antes de que se instalaran, y el teléfono móvil (que llamó "radio individual"), que predijo con casi cuatro décadas de anticipación.
Eliminar¿Has caído en la tentación de realizar alguna predicción ya sea directamente o indirectamente en algunos de tus libros?
ResponderEliminarEn los libros de divulgación, creo que no. En las novelas de ciencia-ficción sí, pero algunas de las cosas que predije no me las creo yo mismo. Por ejemplo: la trasferencia de materia (y de seres humanos) a la velocidad de la luz; la visión del pasado en un cronovisor; la inteligencia artificial fuerte; y cosas así.
EliminarHola felicitaciones por el artículo. El periodista Pablo J. Ginés le gustó mucho y lo ha publicado en su cuenta de facebook. Creo, que también lo voy a hacer yo.
ResponderEliminarEsto es una prueba de dos cosas que confundimos los deseoos con la realidad y que atribuimos a la ciencia un capacidad que no tiene, como si lo fuera a resolver todo como por arte de magia. Hombre también hay que decir algo en favor de los aspirantes a vaticinadores y futurólogos. Es muy complicado acertar, creo, que muy pocos poseen el don de la videncia. Quizá Verne, Chesterton, Benson, Aldous Huxley y alguno más.
Si es arriesgado adelantarse a los acontecimientos sobre supuestos descubrimientos del futuro, como lo de la inteligencia artificial no comprendo el intereses y la felicidad que causa el trato y comparacion que nos hacen los reduccionistas con maquinas.
ResponderEliminarPero bueno tambien hay cientificos humanistas con otras actitudes que aclarais los prejuicios y manipulaciones de la sociedad actual
ResponderEliminarhttps://m.youtube.com/watch?v=9QK5RfcxTH4&t=398s mire aqui al doctor francisco rubia con su cientifismo desbordado y diciendo tambien que los estados misticos son por fallos debido a la epilepsia segun el doctor, buda jesus etc tenian zonas destrozadas de su cerebro , en otras entrevistas tiene esa actitud dogmatica y parece como si estubiera enfadado o amargado pone unos gestos secos y toscos
ResponderEliminarSeguro que Rubia conoció personalmente a Buda y a Jesús y les estudió el cerebro. Lo que dice es puramente ideológico, no puede ser menos científico. El jueves próximo voy a publicar en este blog un artículo que habla de esas cosas.
EliminarLa entrevistadora le daba otras opciones le preguntaba si alomejor ciertas zonas cerebrales serian las receptoras y no causantes de las situaciones misticas y la chica ponia el ejemplo de un televisor que capta la informacion pero no crea la peli en la pantalla y con el cerebro podria ser parecido y el profesor rubia ponia una cara de desprecio y lo negaba tajantemente claro.
ResponderEliminarFrase de jose rubia: hay gente sobre todo religiosa que me dice que soy un reduccionista la ciencia es reduccionista por naturaleza, usarla como arma arrojadiza es un absurdo asi que aparquemos lo del reduccionismo a un lado porque no lo considero ni siquiera digno de discutirlo . muy tajante y arrogante el doctor
ResponderEliminarY eso de negar el libre albedrio solo porque haya una actividad cerebral previa a la persona no tiene porque negar el libre albredio porque es la propia persona no fue otra quien eligio por ella lo que pasa es que intrepetaron esos experimentos de forma sesgada
ResponderEliminarDon Manuel, ¿es cierto que existen los cristales del tiempo como otro estado de la materia?
ResponderEliminarEs cierto. En un cristal normal se repiten las posiciones de los átomos según una distribución espacial fija. En un cristal del tiempo se repiten además en el tiempo, es decir, el cristal oscila periódicamente entre varias estructuras sucesivas. Pero no es un estado de la materia, sino una distribución espacio-temporal, como un cristal normal tampoco es un estado, sino una distribución espacial.
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