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Isaac Asimov |
Noticia
publicada el 20 de noviembre de 2007 en ABC:
El Jugene, el ordenador civil más
potente y ecológico del mundo, es alemán. [En la] localidad renana de Jülich [se
ha puesto en marcha] el Jugene (Jülicher Blue Gene), cuyas 167.000 millones de
operaciones básicas (teraflops) por segundo lo han aupado como el primero del
mundo para uso civil...
En realidad, los ordenadores
más potentes de entonces funcionaban a unos pocos cientos de teraflops. La
noticia exagera la velocidad en nueve órdenes de magnitud. Este error no ha
sido corregido.
Oído en Radio Nacional el 30
de mayo de 2008: Los pescadores se quejan de la subida del
gasóleo. Hace cinco años les costaba un 320% menos. O sea, hace
cinco años les pagaban por llenar el depósito.
Veamos otro ejemplo publicado en ABC el 18/2/2020. El titular dice: Científicos logran generar electricidad de la “nada”. El texto aclara que la saca de la humedad del aire actuando sobre una proteína.
Cualquier
afirmación debe ser correcta y contrastada
Todo lo que se diga debe
comprobarse detenidamente para asegurarnos que no se trata de un error, de una
noticia apresurada o tergiversada, o en el peor caso, de una noticia falsa.
Otro error típico de la
divulgación científica en los medios de comunicación es presentar como
realizadas noticias que en realidad no son más que predicciones de futuro. Esto
suele ocurrir sobre todo en los titulares, porque se intenta siempre reducirlos
al tamaño mínimo manteniendo el máximo impacto. Por ejemplo, en la noticia
publicada en ABC el 13/2/2020, el titular es Marte
también se hizo a golpes y durante mucho tiempo. El subtítulo,
sin embargo, es mucho menos tajante. Lo que el titular da como seguro, pasa a
ser sólo posible: El planeta rojo pudo ser impactado por
pequeños mundos de distintos tamaños en los inicios de su historia.
La estadística se presta a
muchas manipulaciones, a veces con consecuencias inesperadas:
En 1995, un estudio demostró que la píldora
anticonceptiva aumenta un 100% el riesgo de trombo-embolia. La prensa lo
publicó con grandes titulares. Miles de mujeres dejaron de tomar la píldora. Se
estima que, en consecuencia, se produjeron 10.000 abortos más, sólo en Gran
Bretaña.
¿Qué había pasado en
realidad? ¿Qué descubrió ese estudio?
Riesgo de trombo-embolia en
mujeres que no toman la píldora: 1 en 14.000.
Riesgo de trombo-embolia en mujeres que toman la píldora: 2 en 14.000.
En este caso, la noticia no
era incorrecta. Lo que estaba mal era la forma de plantearla. Es verdad que el
riesgo aumentaba un 100% (de 0,00007 a 0,00014). Pero expresada así, la noticia
se prestaba a provocar un pánico, como así ocurrió.
Veamos una lista de 20 divulgadores
famosos de todos los tiempos:
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Michael Faraday |
Galileo Galilei, Michael Faraday, Jean Martin Charcot,
Camille Flammarion, George Gamow, Willy Ley, Isaac Asimov, Arthur C. Clarke, Konrad Lorenz, Stephen Jay Gould, Martin Gardner, Douglas Hofstadter, Ian
Stewart, Raymond Smullyan, Steven Weinberg, Richard Feynman, Carl Sagan,
Stephen Hawking, Roger Penrose y Paul Davies.
A los que añadiré cuatro divulgadores
españoles famosos:
Santiago Ramón y Cajal, Josep Comas i Solà, Gregorio
Marañón y Félix Rodríguez de la Fuente.
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Santiago Ramón y Cajal |
Casi todos ellos eran
científicos, distribuidos entre las siguientes especialidades: 3 matemáticos,
12 físicos, químicos y astrónomos, 3 biólogos, 4 médicos y un ingeniero. La
excepción es Martin Gardner, que se graduó en filosofía, aunque luego se
especializó en filosofía de las matemáticas. Algunos de ellos abordaron varias
disciplinas o se mantuvieron al día en ellas, al menos desde el punto de vista
divulgativo.
Muchos de los divulgadores
mencionados abordaron también la otra forma de divulgar la ciencia: a
través de la ficción. Algunos de los nombres indicados son también
famosos como autores de novelas de ciencia-ficción o simplemente de ficción,
con algún detalle científico: Asimov, Clarke, Gamow, Sagan, Davies, Ramón y
Cajal, y Marañón escribieron novelas, algunas de las cuales están consideradas
entre las mejores del género.
¿Nacen los divulgadores o se
hacen? Seguramente ambas cosas a la vez. La mejor definición de un divulgador
la dio Willy Ley, cuando uno de sus maestros planteó a sus alumnos que hicieran
un trabajo desarrollando la siguiente cuestión: qué quiero ser de mayor y por qué.
Willy Ley respondió: Quiero ser
explorador. Al maestro no le gustó la respuesta, dijo que ya no
quedaba nada por explorar. Evidentemente, el maestro se equivocaba.
Manuel Alfonseca
Agradezco a Felipe Gómez-Pallete,
que me sugirió el tema de este artículo.
Felices vacaciones. Hasta septiembre
que me sugirió el tema de este artículo.
Felices vacaciones. Hasta septiembre